Comentario de Cien de Cine
El prejuicio negativo lo llevo antes de entrar en la sala. Pero pienso que la cinta puede sorprenderme. Cuantas historias, de las llamadas anónimas, acaban teniendo más fuerzas que las historias de ficción controlada en cada escena y en cada diálogo. Así que a pesar de que la premisa me frena accedo con la mente abierta a descubrir este cóctel cinematográfico que Isabel Coixet se ha encargado de mezclar.
Un inicio nocturno hace pensar que no habrá una línea cronológica en la película. Que de repente desaparece cuando comienzan los despertares en España, o mejor dicho, entre los españoles. Porque es curioso cómo a pesar de que el título es sobre lo que sucede en España en un día, acabamos viendo muchas vidas de españoles fuera del país. En cambio, los inmigrantes que vemos, acaban convertidos en españoles. Una contradicción que me desconcierta.
Luego está la trama. No voy a quitar ningún mérito a la elección y el montaje. Pero como dicen algunos montadores. Si no has rodado la escena no la busques. Aquí tenemos el material que tenemos y no queda otra que saber utilizarlo. Es más que posible que las historias no dieran para más. O que la calidad de imagen no llegara a un mínimo. Del sonido ya ni hablemos.
Alguna de las historias tienen potencial. Pero precisamente por ser auto creadas pierden frescura. Otras son claramente un trabajo cinematográfico intencionado. Y mientras pasan unas y otras y vas desconectando del hilo piensas que necesidad tenemos de exhibirnos constantemente. De pensar que nuestra vida puede interesar a otras personas. Porque aquí tenemos estos pedazos de vidas editadas. Pero en la red hay millones en bruto que casi nadie mirará jamás.
Seguramente éste es el experimento sociológico que quería Mercedes Milà. |