Director Cécile Telerman
Guión Cécile Telerman / Jérôme Soubeyrand
Intérpretes Mathilde Seigner / Olivier Marchal / Pascal Elbé / Charlotte Rampling / Patrick Chesnais / Sophie Cattani / Marina Tomé / Gwendoline Hamon / Laurent Olmedo / Françoise Lebrun
Ficha Técnica
Productora

Distribuidoras
España: golem

Quelque chose à te dire - (2009)
104' - Francia - comedia / drama
| jordi mb ****


AKA

Estrenos
18 de Diciembre de 2009 - España

Festivales


Premios

Comentario de Cien de Cine

Hay algo en la vida que además del dinero y el sexo mueve a los seres humanos. La mentira. Que además si lo juntamos con esos dos elementos y lo mezclamos con la familia, sale esta magnífica película de Cécile Telerman. La historia de una familia, y sus ramificaciones pasadas.
Uno de los elementos que más aplaudo de la sociedad francesa que antes era de izquierdas pero que con los años se ha ido centrando, sino posicionándose a la derecha, es el no esconderse de ellos. En España vemos a los artistas y cineastas que tanto abanderan el socialismo e ideales de izquierda tener una vida conservadora y con un poder adquisitivo y de vida superior, con claridad, al resto de la sociedad. Los mismo que ha sucedido en Francia, pero aquí por la boca y en sus película siguen intentando hacernos creer que son así mientras que en Francia han aceptado el cambio y así lo viven, los muestra, y no se esconden de ello. De joven hay que ser de izquierdas y de adulto de derechas, dicen algunos.
La familia de Toda la culpa es de mi madre así lo muestra claramente. Una familia que tiene su pasado más liberal, hippie, que ahora no podría vivir sin sus exclusividades, separándose de la prole, de las masas. Sus tres hijos ya han vivido con todas las comodidades de una familia con capacidad económica para ofrecerles todo lo que ellos no tuvieron y cada uno ha salido con sus particularidades.
Charlotte Rampling crea a Mady, un fantástico personaje, el de una mujer que se ha dejado llevar por la comodidad ofrecida de su marido frente a la oportunidad de vivir una vida feliz como ella misma podría haber soñado en su juventud. Junto a Mady está su marido, que llegada a la jubilación no sabrá que hacer con su vida y su esposa. Una interpretación fantástica de Patrick Chesnais que buscará la manera de sentirse útil al mismo tiempo que descubrirá en que se ha convertido su esposa después de tantos años de casados.
Para cerrar esta familia tres hijos, comenzado por un excepcional Pascal Elbe, que esta genial como actor, pero como personaje deja mucho que desear, creando un hijo que lleva la mentira familiar a límites extremos y que vivir siempre con los lujos y sin preocupaciones de su familia no le ha permitido luchar por sus sueños que los destroza una y otra vez en sus manos. De la misma manera que Mathilde Seigner siendo la hija bohémia de la familia, no se preocupará por el precio de vivir gracias a las rentas de su familia, convirtiéndose en un ser falso, y el que va a traer la trama más violenta a la familia. Para cerrar está Annabelle (Sophie Cattani) la hija encargada de repetir los errores, que todos los hijos deben copiar de sus padres.
Como es habitual el cine francés nos hace disfrutar de sus historias. No es fácil contar las realidades de una sociedad concreta y hacer que fuera de sus fronteras se entiendan y acaben por interesar a sus espectadores. Además personalmente sintiendo envidia de que en nuestro país no seamos capaces de hacer y mostrar nuestra realidad con toda tranquilidad. Somos los que somos y somos de donde venimos. Así que menos miedos y más sinceridad... aunque esté forjada en una mentira.
jordi motlló borrella