Ya estamos un año más en la temporada de premios. En USA los críticos comienzan a elegir sus cintas favoritas. Se comienzan a desmarcar las cintas que aparecerán en los anuarios y aquellas que salen con alguna ventaja de cara a los Oscar. Aquí también los críticos tienen un espacio. Desde hace unos años los Feroz han entrado con fuerza y marcan un camino que los académicos tienen en cuenta.

Para hacerlo todavía más interesante, los Premios Forqué que entregan los productores, se dieron a conocer un día antes. Ahora con los Forqué y los Feroz en marcha, podemos decir que todo está listo para esperar a los Goya. De las Medallas CEC, los más veteranos de todos estos, todavía estamos a la espera de nominaciones, también serán los últimos en entregarse. Justo antes de los Goya.

Destacan dos cintas especialmente. El autor, de Manuel Martín Cuenca, que ha conseguido ser reconocida en el Festival de Toronto, y cuenta con la base literaria de la novela de Javier Cercas, El móvil. Añadido a la presencia del omnipresente Javier Gutiérrez, en un momento dulce profesionalmente, con gran cantidad de trabajos que lo están convirtiendo en un rostro que parece imprescindible en cualquier proyecto. A su lado una de las favoritas de salida, Estiu 1993 (Verano 1993). La película de Carla Simón se dio a conocer hacer casi un año, en el Festival de Berlín, con un par de importantes premios. Luego pasó por Málaga, donde consiguió prácticamente todos los premios paralelos y por supuesto el de Mejor Película.

En Málaga también destacaron las interpretaciones de No sé decir adiós. No se han olvidado a Nathalie Poza ni Juan Diego en estas nominaciones. Dos nombres que tienen muchas opciones para conseguir los premios, una opción clara de ser el premio que pueda llevarse la película frente a la fuerza de las anteriores en otras categorías.

Entre el resto de títulos a destacar Verónica entre las nominaciones de los Feroz. Una gran noticia ser capaces de ofrecer espacio entre lo mejor del año a una cinta dramática con claros aires de género de terror. Algo que, cómo el humor, suele quedar de lado en estos momento. Y hablando de comedia, ya que los Feroz tienen apartado propio a Mejor Película para este género, es agradable ver a un documental en esta categoría. El trabajo de Gustavo Salmerón, Muchos hijos, un mono y un castillo, va a ser uno de los más destacados para cerrar el año cinematográfico, y añadirá una nueva característica a la clasificación de documental.

Puedes comentar a través de tu perfil de facebook