#1232 - Marcar más los colmillos.

 

 

Entregados los décimos Feroz, queda claro que son unos premios con fuerza e importancia, sobretodo porque han conseguido tener un elemento diferencial, como es el del reconocimiento del trabajo de las series televisivas españolas. Habituados a los premios en los Emmy, la Academia de la televisión no ha tenido la capacidad de crear unos premiso con fuerza que puedan valorar el trabajo artístico de las series que ahora copan canales y plataformas.

La AICE la forman (formamos) solamente 250 informadores. No es una cifra muy alta, pero al final es claramente el grupo que conforma esta asociación. Que puede crecer o decrecer en los próximos años. Pero no podrá compararse con los Oscar o los Goya. Al final informa quien informa, y decide ofrecer su experiencia en estos premios, quién quiere. Tan curiosos pueden ser, como que los tres premios que se considera que deben ir siempre de la mano, y que normalmente la prensa especializada indica que deberían entregarse siempre conjuntamente, película, dirección y guión, este año han diversificado películas, As bestas, Alcarràs y Cinco lobitos respectivamente.

A veces parece que se quiera quedar bien con todo el mundo y que nadie salga con las manos vacías. Si fuera tan fácil amañar las cosas no tendría tanta gracia. Pero el gran drama de los Feroz sigue siendo la ceremonia.

Tantas críticas que cuando se entregan los Goya y los Oscar se quejan de la duración, y en cambio no somos capaces de cambiar el estilo de entrega de premios. Se ha conseguido que no haya un tiempo que supedite la ceremonia, al ofrecerse por streaming, de acceso libre, pero en cambio se sigue haciendo de madrugada. Al mismo tiempo que se repite el formato de presentación de candidaturas y agradecimiento. Pero estos son premiso que no se entrega la misma industria, lo hace la otra parte, la que comparte gustos y da a conocer los trabajos.

Antes de la ceremonia se realizó un pequeño debate hablando de las películas. Quién sabe, pero igual la entrega de premios debería acabando derivando a un grupo de charla con los mejores del año. Muchos premios de la crítica de USA no tienen nominaciones y directamente presentan un día la lista de premiados y luego una ceremonia de entrega. Podría cambiarse el sistema, y con lo activos y audaces que son los feroces, nunca hay que pensar que se haya escuchado el último aullido.

Darán mucho que gritar.