#1196 - El guión de Cruise.

 

 

Si estamos en Cannes la gran pantalla en la sala grande es la única opción, pero Misión Imposible está en todas las plataformas que quieran comprar sus derechos. Se pueden poner todos los peros y los equilibrios que se quiera a la hora de defender el uso de la plataformas para unas cosas u otras, pero al final, si una película, sea de acción espectacular como la saga Misión Imposible, o Top Gun, o más tranquila visualmente como pueda ser Alcarràs, si han sido pensadas y creadas para ser vistas en la gran pantalla, entonces nunca, y nunca es nuca, debería ser ofrecida en ningún otro formato que el de la gran pantalla.

Habrá puristas del cine y de admirar todas las películas en el formato de Cannes, sólo en la gran pantalla, pero entonces, si lo son de verdad, la historia del cine sólo la deberían descubrir cuando la ofrezcan ciclos de las filmotecas más cercanas, y de los festivales a los que pueda asistir, con la dificultad que supone estar en manos de la programación de estos eventos.

Durante años ha sido así. No había más remedio que esperar a los ciclos de filmotecas, o algunas reposiciones, para descubrir películas que se han convertido en historia del séptimo arte. Pero los años pasan y hay opciones que nos facilitan, si queremos seguir creciendo culturalmente. Hoy en día es mucho más fácil, si queremos, conseguir hacer un repaso histórico de lo que ha sido la historia del cine.

Nunca podremos vivirlo tan bien como si hubiéramos estado, por lo que hay que confiar en los historiadores que hayan tenido la suerte de publicar y, también perdurar. Así podremos acabar de decidir por nuestra cuenta cuál de las dos películas clásicas es la mejor de la historia, si Ciudadano Kane o Vértigo. Luego, si tenemos tiempo y ganas, podemos acabar realizando nuestra propia lista de películas, con el criterio personal, que también ha sido el de los historiadores que nos han precedido.

Decidir que el cine sólo se puede ver en la gran pantalla es una salvajada. Hay que aceptar que tras su estreno, debe seguir su recorrido en otros canales y con otros formatos. O eso, o prohibir, como quieren hacer algunos, que su trabajo sea sólo visto a través de la sala de proyecciones. Son opciones, pero se alejan del supuesto deseo de todo creador, llegar al máximo posible de público, para que conozcan la historia que desean contar.

Ir a Cannes a decir que no hay nada mejor que el cine en pantalla grande parece más decir lo que desean escuchar que creer que se dice con sinceridad. Igualmente Cannes debería aceptar que las películas pueden tener multitud de sistemas de proyecciones, y por supuesto, pueden elegir el que más les guste para su festival. Pero entonces que no se quejen si ciertas producciones que desearían ver en su festival, no cumplen con sus estrictos criterios.